martes, 28 de octubre de 2008

Que todo se repita

Duerme apoyada con su cabeza en mis rodillas.
La casa huele a sardinas. También a perro, tenemos tres. Y cada uno de ellos tiene el nombre del día que entró a formar parte de nuestra familia.
Son feos, bueno, irregulares, mestizos les llaman; excepto el cocker, que es cocker. Hoy no ha salido el sol. También se les ha olvido a los del ayuntamiento encender las farolas.
Formo parte de algo, y ese algo forma parte de mí. Familia.
La programación televisiva, eso me da igual.
Bea duerme apoyada con su cabeza en mis rodillas, me contorsiono y le beso la frente. Muak.
No somos hijas de nadie. Somos producto de todo.
La invitaría a bailar, pero duerme apoyada con su cabeza en mis rodillas.
De camino a casa, ví un caballo blanco. Destacaba en el paisaje, porque se les ha olvidado a los del ayuntamiento encender las farolas.
Son tres, y sumamos cinco.
Hoy no ha salido el sol, eso me da igual.

2 comentarios:

Beatrice dijo...

Siempre dormiré en tus rodillas, si tú me dejas. La casa sigue oliendo a sardinas

Eva dijo...

Una família de 5. Así que sois família numerosa. Por eso deben de dar ayuda, no? :P
Precioso eso de tener a alguien tan cerquita, cuando estás con alguien así de bien cualquier barrera se salta como si fuese un obstáculo fácil.
Besitos.